martes, marzo 21, 2006

ENCUENTROS


El recurso del aire

es el aire,

el descenso,

el punto que centra

la caída momentánea del galope;

el verbo.


Proyecto

En la mesa

el silencio, patas arriba,

ignora un montón de enlaces.

Aquí está el proyecto,

en una habitación

a manotazos cerrada.


Fuente

Comienza el agua la danza,

sin bridas va dibujando

su equilibrio tumultuoso

con esa música que, al hendir,

gravita vivaz como las horas dormidas,

encendiendo

un mismo orden, retazo o leño


Rincón

El corte y el impulso

tienen un sentido,

que en piedra angular

como mortífera arma de manifiesta,

en el salón es orden y recuento,

hipotética permanencia.


Penumbra

¡Ay de aquél! que dice:

La sombra que baila

no tiene luz que la crea

ni materia que la concluye.

El castigo le ocultará

dulces presencias

de delicada porcelana.


Metamorfosis

"Y ya digo
que si la inmolación no es crimen,
seguro que es engaño."

Ante el juez,

que un sueño no concede,

la oruga redime a la mariposa atrapada.

Con estos hechos, la función

nos deja en entredicho.

La transmutación es simple melancolía

de perdurar en los nombres no mencionados.

Cumplidos todos los requisitos exigidos,

morir es una forma de pasar el tiempo.


Vestíbulo

Se retrasa el duelo,

jinetes, pasillo arriba, esperan ascensores,

merecen otro rasgo

que imagen de galope, crimen o alevosía,

no sólo corbata, estandarte, herida,

charco o tiempo.


Nocturno

Lo gravoso no es esperar el envejecimiento,

que su doliente corazón espera,

sino la certeza que en el próximo recodo

cualquier desliz o desenlace

puede perturbar los designios previamente negociados.


Velatorio

Sit tibi terra levis!

La figura yacente

encarna los pasos que a la cita acuden.

El silencio dulcísimo ha confundido la morada,

inesperadas e imaginarias causas

encuentran voz, oído y engaño.

Sirvientes traicionan y disponen

como de cualquier asesinado.